se puso sus mejores galas para disfrutar el juego de los PUMAS, lástima que fue un partido de mediana calidad, pero lo disfrutó en grande y espera volver muy pronto al estadio Olímpico Universitario... ¡Cómo no te voy a querer, cómo no te voy a querer... si mi corazón azul es y mi piel dorada...!
Observen con atención a estos niños y jóvenes, piensen qué colores, tonalidades e intensidades podrían pintar si vieran la realidad escolar con esas miradas.
Nuevamente, el trabajo realizado en las escuelas primarias comienza a dar sus frutos, por ello en el taller "Pintemos la realidad escolar de diferentes colores, tonalidades e intensidades" nuevos aires se respiran. A partir de ahora bailaremos con los molinillos, cantaremos historias hechas corridos. Una maestra rural sembrará en el campo de la enseñanza, veremos varias ventanas sin vidrios, aprenderemos a leer y a escribir códices. Los pequeños diegos con su aprendizaje crearán una epopeya. Un grupo de adolescentes encabezados por su líder nos demostrarán que ellos controlan el universo. En cambio otros pequeños irán en pos de los sueños de Porfirio y tal vez en su camino se encuentren a unos alumnos que con cuidado llevarán un tesoro al Alcázar y en ese ir y venir una luz nos guiará por el camino del conocimiento.
Definitivamente nuevas creaciones están en puerta, lástima que en estos momentos Jorge Luis Borges y Mafalda preparan su equipaje porque en breve abandonarán el taller. Durante un año vivieron las angustias y las satisfacciones que tuvieron los pintores de la generación 2006 – 20010. Ellos se encuentran en otros lares y estos dos personajes hacen votos para que no solo continúen pintando sino esta locura la hayan compartido en sus centros de trabajo.
Pero ahora quiénes llegarán a este lugar de creación… pronto lo sabremos porque sus pisadas ya se escuchan. Por lo pronto a cada uno de los actuales habitantes del taller les mando un abrazo y un reconocimiento por el esfuerzo cognitivo que implicó definir el título de su pintura, no fue fácil pero recuerden que los sueños sólo se realizan a partir del trabajo diario, intenso y compartido.